Ventosas Faciales

Las ventosas faciales FASCIQ están fabricadas con silicona de grado médico para ofrecer seguridad y comodidad. La combinación de tamaños ideales permite tratar diversas zonas, obteniendo resultados profesionales para una piel radiante y saludable en casa.

  • Composición: Ventosas de silicona de grado médico, Libre de látex
  • Dimensiones
    • Mini: ø 18 mm x 50 mm (altura) x 2
    • Mediana: ø 38 mm x 80 mm (altura) x 2

Las ventosas faciales FASCIQ funcionan mediante la creación de un vacío en la piel, lo que ayuda a mejorar la circulación sanguínea, aumentar el flujo linfático y estimular la producción de colágeno. Estos efectos combinados pueden resultar en una piel más firme, reducción de la hinchazón facial y una apariencia general más saludable. Además, el uso regular de las ventosas faciales puede contribuir a mejorar la absorción de productos para el cuidado de la piel.

Las ventosas faciales FASCIQ son generalmente seguras para la mayoría de los tipos de piel. Sin embargo, es recomendable realizar una prueba en una pequeña área de la piel antes de usarlas extensivamente, especialmente si tienes piel sensible. Evita el uso en áreas con acné activo, irritaciones cutáneas o heridas abiertas. Consulta a un dermatólogo si tienes preocupaciones específicas sobre tu tipo de piel.

Se recomienda usar las ventosas faciales FASCIQ durante unos 5-10 minutos por sesión para evitar la irritación de la piel. La frecuencia de uso puede variar, pero se sugiere utilizarlas de 1 a 3 veces por semana para obtener resultados efectivos. Es crucial seguir las recomendaciones específicas del fabricante para evitar posibles efectos adversos.

Sí, las ventosas faciales FASCIQ pueden combinarse con otros productos de cuidado de la piel. Se recomienda aplicar un aceite o suero facial antes de usar las ventosas para facilitar el deslizamiento y maximizar los beneficios. Sin embargo, evita el uso de productos agresivos o exfoliantes inmediatamente antes o después de una sesión de ventosas para prevenir irritaciones.

Para mantener la higiene, limpia las ventosas faciales FASCIQ con agua tibia y jabón suave después de cada uso. Asegúrate de secar completamente las ventosas antes de guardarlas. Siguiendo estas prácticas, prolongarás la vida útil del producto y evitarás posibles problemas cutáneos.